Nuestra historia

todo comenzó así

Hasta mediados del año 1931, los Oficiales retirados del Ejército iban a recluirse en su hogar, ésta circunstancia tenía como corolario inevitable la desvinculación de sus mejores compañeros de armas con quienes habían compartido las penurias de la vida militar al servicio de la Patria.

En el retiro el Oficial iba olvidando a sus buenos Jefes de otrora, y a sus amigos más queridos, era fácil presa de la nostalgia causada por el alejamiento forzoso del servicio activo. Los lugares de reunión con sus compañeros de armas eran las calles o las plazas de la ciudad, en una palabra, el Oficial se sentía abandonado a su propia suerte.

De este panorama ingrato, que deprimía la dignidad del Oficial que la vivía, surgió en algunos espíritus selectos la idea del retirado y la de su hogar. Consecuentemente con tan noble propósito, en el curso del primer semestre del año 1931 se efectuaron algunas reuniones privadas donde se lograron algunos compromisos para la realización de tan magnífica iniciativa. Para cristalizarla, convinieron en reunirse el 27 de Junio en el local del Directorio de las Sociedades de Tiro, sito en la calle de la Moneda Nº 790, oficiales superiores y subalternos del Ejército en situación de retiro. El Teniente Coronel César Telémaco Legrand Vargas manifestó que la reunión tenía por objeto conocer las ideas de que los retirados se unieran para formar una Sociedad de Auxilios Mutuos, habiendo sido aceptada unánimemente esta sugerencia.

Por tal motivo, el día veintisiete de junio de mil novecientos treinta y uno, en la ciudad de Lima, siendo las cuatro y cincuenta minutos de la tarde, en el local de la Sociedad de Tiro del Perú, sito en la calle de la Moneda Nº 790, se reunieron parte de los señores Oficiales en retiro, con el objeto de asociarse. Todos los concurrentes aprobaron esta iniciativa y firmaron el pliego en referencia, el mismo que quedó abierto a la firma de los que aceptasen formar parte de la sociedad.

El Teniente Coronel César Telémaco Legrand Vargas, manifestó que la reunión tenía por objeto hacer conocer la idea, de que los oficiales en la situación de retiro, se unieran para formar una SOCIEDAD habiendo sido aceptada. Enseguida el mismo jefe hizo presente que en ese momento sesionaba también la SOCIEDAD DE FUNDADORES DE LA INDEPENDENCIA Y VENCEDORES DEL 2 DE MAYO Y DEFENSORES CALIFICADOS DE LA PATRIA, en la cual se encontraba un buen número de Oficiales de los distintos Institutos Armados en la situación de retiro, y que en consecuencia era conveniente volver a reunirse para que asistieran el mayor número posible de oficiales, concretándose en este acto la firma del acta de los concurrentes.

A las diecisiete horas terminó esta primera reunión, habiéndose citado para una segunda, que debería tener lugar el día 30 del citado mes de junio, a las cuatro de la tarde y en el mismo local.

adofaipTres días más tarde, el 30 de junio y posteriormente el 09 de julio del mismo año de 1931 se reunieron para completar la elección de una Junta Directiva Provisional mientras se formulara el correspondiente ESTATUTO. Es así como nace bajo el impulso del noble sentimiento de estrecha camaradería y ayuda mutua a iniciativa del Teniente Coronel Legrand Vargas, la Sociedad de Auxilios Mutuos de los Institutos Armados del Perú, que hoy con nombre de ASOCIACION DE OFICIALES EN RETIRO DE LAS FUERZAS ARMADAS Y POLICIA NACIONAL DEL PERU, cuya sigla es ADORFAIP, agrupa Oficiales en situación de retiro y actividad.

Es necesario hacer notar que, por esa época nuestra Patria vivía un ambiente en el que se sentía los efectos de la Depresión Económica Mundial de 1930 – 1931; además el Perú experimentaba una grave crisis social.

Su fundador fue el señor Teniente Coronel del Ejército Peruano, del Arma de Infantería, don César Telémaco Legrand Vargas, cuya acta de fundación se firmó en la ciudad de Lima a las cuatro y cincuenta de la tarde del día 27 de Junio de 1931, en el local del Directorio de las Sociedades de Tiro del Perú, sito en la calle de la Moneda Nº 790; insinuando al mismo tiempo la conveniencia de designar la persona que debería dirigir los destinos de la Sociedad, habiendo sido designado para el efecto el Coronel del Ejército Peruano don RICARDO SEVILLA PERALTA, como Presidente de la Junta Directiva Provisional, siendo por lo tanto, el primer Presidente de la Sociedad de Retirados de Auxilios Mutuos de los Institutos Armados del Perú.

Ahora bien, los datos bibliográficos del Teniente Coronel César Telémaco Legrand Vargas, fundador de la ADORFAIP, son ; nació en la heroica ciudad de Tacna el 11 de Julio de 1874, ascendiendo a Subteniente de Infantería del Ejército Peruano, por Despacho otorgado por el Excelentísimo Señor General don Andrés Avelino Cáceres, Héroe de Breña. Obtuvo sucesivos ascensos hasta que, el primero de febrero de 1924, asciende al grado de Teniente Coronel. Falleció el 14 de Abril de 1941, cuyos restos mortales reposan en el Cementerio “El Ángel” en la ciudad de Lima.

El primer Presidente de nuestra Asociación fue el señor Coronel del Ejército Peruano Ricardo Sevilla Peralta, nació en la ciudad de Lima el 15 de enero de 1862, perteneció al Arma de Caballería, cuyo Despacho de Alférez fue conferido por el General de División del Ejército Peruano don Miguel Iglesias Presidente de la República durante los años 1882 – 1885. Falleció el 08 de Abril de 1932, cuyos restos al igual que nuestro fundador Teniente Coronel Legrand reposan juntos en el mausoleo del Cementerio “El Angel”, que será el relicario de sus restos físicos que guardarán por toda la eternidad.

Luego, el Presidente de la Junta Nacional de Gobierno, expide el Decreto Supremo de fecha 19 de Octubre de 1931 en que reconoce oficialmente como residencia legal en la capital de la República la existencia de la Sociedad de Auxilios Mutuos de los Institutos Armados del Perú, constituida por todos los Jefes y Oficiales del Ejército, Marina y la Guardia Civil en situación de retiro, así como la aprobación del Estatuto de la referida institución, compuesto por 76 artículos, el que regirá la marcha de ella y entrará en vigencia a partir del primero de noviembre de 1931.

En 1932, la Junta Directiva se concreta a establecer un sistema administrativo tal, que permite proporcionar un auxilio económico inmediato, a la persona o personas designadas por el asociado en su carta declaratoria para el caso de su fallecimiento.

 

Posteriormente la Resolución Suprema del 31 de Agosto de 1933, autoriza en la Sociedad la creación de la sección económica, por el Sistema de emisión de acciones nominales.

En seguida, la Resolución Suprema del 27 de Junio de 1940 autoriza la primera reforma del Estatuto, la que incluye disposiciones tendientes a satisfacer las necesidades y obligaciones creadas en la Sociedad. Una de las modificaciones más saltante fue autorizar el ingreso de los Oficiales Superiores y Subalternos en servicio activo, con las condiciones establecidas por dicho documento.

Doce años más tarde, a fin de dar mayor impulso al desenvolvimiento de la Sociedad se hace necesaria una nueva reforma de este instrumento legal, Por Resolución Suprema del 02 de Julio de 1952 se autoriza la reforma solicitada.

Este nuevo Estatuto tiende a perfeccionar el de 1940, y, entre sus modificaciones sustanciales está la que incluye como miembros de la Institución, a los señores generales de los Institutos Armados, así como a los de la Guardia Civil; crea también la “Sección de Asistencia Familiar”, es decir, autoriza el ingreso de las esposas de los asociados, en calidad de cotizantes.

 

Como lo hemos expresado en las primeras líneas de ésta reseña histórica, los retirados hicieron sus primeras reuniones en locales prestados, ya por el Directorio de las Sociedades de Tiro, y en mucho tiempo, por la Sociedad Fundadores de la Independencia, Vencedores del 2 de Mayo y Defensores Calificados de la Patria. Era pues necesario que la Sociedad tuviera un local propio donde poder sesionar y organizarse debidamente; ésta necesidad era más imperiosa cada día, hasta que, aprovechando una feliz oportunidad, el Mayor Segundo R. Briceño, trató el asunto con el Diputado por Ayabaca, señor Capitán Ernesto Merino Rivera, quién se abocó la dura tarea de gestionar y obtener del Congreso de la República una ley a favor de la Sociedad. Fue durante el Gobierno del señor General don Oscar R. Benavides que se expide la Ley Nº 7960 el 28 de Diciembre de 1934, por la cual se otorga a la Sociedad en propiedad, la vetusta casa Nº 790 sito en la calle de La Moneda, ocupada por el Directorio de las Sociedades de Tiro, toma posesión de esa propiedad, según testimonio Nº 14 que obra en los archivos.

En 1951, el Presidente de la Institución gestiona y obtiene su inscripción en el registro de Asociaciones. El acto tuvo lugar el 09 de Octubre de ese mismo año.

Ahora, era necesario el acondicionamiento de la propiedad adquirida, por ello, en el mes de Julio de 1946, una comisión presidida por el Coronel César E. Pardo, estudia y presenta un proyecto para llevar a cabo la construcción de un edificio para la Sociedad, que por causas desconocidas, no llegó a feliz término.

Al comenzar el año de 1952, revive la brillante idea dejada por el Coronel Pardo para dar a la Institución un local que guardara armonía con la prestancia de sus asociados. Luego se adquirieron primero la casa que hacia esquina colindante al local por la suma de CIENTO VEINTE MIL SOLES DE ORO (S/. 120,000.00) y después se gestionó y obtuvo la compra de otra pequeña casita situada en la Calle Pajuelo, por la suma de CUARENTA Y CINCO MIL SOLES DE ORO (S/.45,000.00), operación ésta que se llevó a cabo el 15 de Diciembre de 1953, con recursos propios de la Sociedad.

Las Juntas Directivas de 1953 y 1954 se abocan la tarea de elaborar y financiar el tantas veces mencionado proyecto. Corresponde a las Juntas Directivas de 1955 y 1956 presididas por el Coronel José Portugal, haber confrontado con altura los embates de una inquietante tempestad de ideas, desencadenada en el seno de repetidas Asambleas Extraordinarias, convocadas para prestar su aprobación al proyecto y a la forma en que debería ejecutarse la obra.

Así, la brillante idea, generada en 1946 por el Coronel Pardo, quedó convertida en hermosa realidad, el edificio de la calle de La Moneda, que para orgullo nuestro, el Estado no había contribuido con un solo centavo en su financiación. La inauguración fue el 25 de Octubre de 1956, en ceremonia altamente emotiva, que fue realzada con la presencia del Primer Mandatario de la Nación Dr. Manuel Prado U.

La Asamblea General realizada el 21 de Abril de 1955, autorizó la creación y publicación de la Revista de la Sociedad de Retirados de los Institutos Armados del Perú, hoy, Asociación de Oficiales de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú (ADOFAIP), que viene hacer el medio de comunicación y difusión del pensamiento de los Miembros de la Fuerza Armada y Policía Nacional del Perú. A partir del año de 1986 la mencionada revista dejó de salir a circulación, por razones económicas.
La ADOFAIP cuenta con un local una residencia de primera calidad ubicado en el distrito de Jesús María – Lima, en la Avenida San Felipe Nº 379, con un área de mil metros cuadrados (1,000 mts2), de los cuales 614,85 mts2 son de construcción. Dicha propiedad fue adquirida en compra el 11 de noviembre del año de 1985, siendo presidente el señor Capitán de Navío don Jaime Saavedra Pinón, por la suma de DOS MIL CUARENTA Y CUATRO MILLONES SEISCIENTOS TREINTA Y DOS MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA SOLES ORO (2´044,632.850), según Escritura Pública que obra en los archivos de la Asociación.